Bajo un mar de carpas blancas se anidan las librerías ofreciendo sus deleites. Los curiosos, como yo, se asoman a dar una ojeada a la gran oferta. Algunos compran, otros
Bajo un mar de carpas blancas se anidan las librerías ofreciendo sus deleites. Los curiosos, como yo, se asoman a dar una ojeada a la gran oferta. Algunos compran, otros